Collarines
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Collarines cervicales
Los collarines cervicales, con dispositivos diseñados para proporcionar soporte y restricciones en el movimiento de la región cervical. Pueden ser flexibles, semiflexibles o rígidos.
Collarín cervical blando
Hecho de material flexible, son aptos para lesiones menores, tortícolis y para descansar la zona cervical.
Asimismo, proporciona al cuello estabilidad y le ayuda a evitar movimientos dolorosos de la cabeza. Igualmente, su espuma blanda envuelve cuidadosamente el cuello y proporciona un calor muy confortable. De esta forma, no solo alivia la columna cervical, sino que también relaja la musculatura.
Collarín cervical semirrígido
Combina elementos rígidos y flexibles, ofreciendo además algo más de soporte que los blandos, pero conservando cierta libertad de movimiento.
Igualmente indicado para lesiones cervicales, traumatismos, artritis cervical postoperatoria y hernia cervical. Está hecho de material plástico y tiene un soporte para la barbilla. La altura y la longitud pueden ajustarse con botones a presión. Toma su forma anatómica del cuello.
Collarín cervical Philadelphia
De forma bivalva, hecho de termoplástico moldeable a baja temperatura, reforzado con piezas rígidas en la zona anterior y posterior. Por consiguiente, sirve para disminuir la movilidad cervical y aliviar el dolor en contextos de contracturas, cérvico braquialgias, traumatismos de partes blandas («latigazos») y traumatismos óseos leves.
Además, está fabricado en plástico antialérgico y consta de dos partes con forma anatómica para adaptarse a la forma del cuello.
Collarín cervical regulable
Presenta aperturas o segmentos modulares que permiten ajustarlo a la curvatura del cuello del paciente, ofreciendo una experiencia más cómoda y personalizable.
Collarín cervical para traqueostomizados
Versión adaptada del collarín Philadelphia con aberturas para permitir el acceso a la canilla traqueal.
La elección del collarín cervical adecuado dependerá de la gravedad de la lesión, las necesidades específicas del paciente y las recomendaciones de un médico o terapeuta ocupacional.